Todo sobre las bolas chinas y cómo utilizarlas

Las bolas chinas, también conocidas como Ben Wa, bolas de geisha, o bolas de Kegel, son pequeñas esferas blandas hechas de silicona que pueden ayudar a mejorar el funcionamiento del suelo pélvico. Se suelen asociar con juguetes sexuales, y aunque benefician la actividad sexual, también están indicadas como instrumentos de gimnasia pasiva.

Hay varias razones por las que una persona puede querer comprar o usar una bola china. Las bolas de Kegel se pueden usar para mejorar la salud, prevenir dificultades con la actividad sexual, aumentar la fuerza del piso pélvico, mejorar el parto, y para prevenir pérdidas involuntarias de orina, heces y gases.

¿Qué son, y para qué sirven las bolas chinas?

Las bolas chinas son esferas blandas que funcionan como pequeñas pesas, ya que dentro contienen otras bolas más pequeñas y de diferente peso. Suelen venir dos bolas unidas por una pequeña tira de silicona, pero también podemos encontrar una sola. Vienen en diferentes tamaños (de entre 4 a 5 cm de diámetro) y pesos (que van desde aproximadamente 35 a 150 gramos). 

Se conocen principalmente por su función sexual, que estimulan la zona erógena con una ligera vibración y ayudan a lubricar rápidamente la vagina. Pero, también es un instrumento para mejorar el músculo del piso pélvico. 

Al fortalecer este músculo obtenemos un mayor control de nuestros esfínteres y no tenemos pérdidas involuntarias, el parto se hace más sencillo, mejora las dificultades durante el sexo como el dolor o molestia, y hasta puede contribuir a tener orgasmos más placenteros. 

¿Quiénes pueden utilizar las bolas chinas?

Ya sea con fines de entretenimiento y placer sexual, o con el propósito de fortalecer el suelo pélvico, las bolas chinas las puede utilizar cualquier persona. 

Si tienes pérdidas involuntarias cuando realizas actividades físicas o estornudas, sientes dolor o molestia durante el sexo, o tienes dificultades para lubricar, las bolas chinas serán una gran herramienta para ti. 

Sin embargo, existen ciertas contraindicaciones para situaciones específicas. Las bolas chinas no están recomendadas si: 

• Estás cursando un embarazo o en cuarentena de parto, ya que el músculo está débil y sin fuerza.
• Después de una cirugía genitourinaria y durante la recuperación.
• Si existe hipertonía, ya que sentirás dolor al utilizarlas. 
• Durante la penetración.
• Durante la menstruación mientras se utilizan tampones o copa menstrual.

¿Qué se siente al utilizarlas?

Las bolas chinas tienen la capacidad de estimular rápidamente, ya que dentro de estas se encuentran otras esferas más pequeñas, que con el movimiento, comienzan a vibrar. No es una impresión abrumadora ni muy fuerte, sino una constante sensación y cosquilleo que puede ser placentero antes del encuentro sexual. 

Al utilizar las clásicas bolas chinas, que son un par, el juguete abarca gran espacio y alcanza el punto G fácilmente. Es esa vibración, justamente en esta zona erógena, lo que promueve una lubricación temprana y fácil.

Lo que debes saber antes de comenzar a usar las bolas chinas

Antes de empezar, es importante hacer una prueba donde identifiquemos nuestro estado actual. Este test es esencial para tener éxito al usarlas y no sentir molestias en ningún momento, sin importar si las deseas para el placer sexual o para ejercitar el suelo pélvico.

Algunas preguntas que puedes realizarte: ¿tienes pérdidas involuntarias y qué tan frecuentes son? ¿Sientes molestias durante el sexo? ¿Tienes dificultades para lubricar? ¿Puedes retener los tampones o la copa menstrual sin dificultad? 

Estas preguntas y sus respuestas son esenciales para determinar con qué instrumentos vas a comenzar, si con una sola o con dos; y el peso con el que sentirás mayor comodidad porque se adaptará a tu nivel. De no ser así, puede que compres unas muy pesadas y no puedas utilizarlas de inmediato. 

Una vez las tengas, comprueba en casa que puedes mantenerlas dentro de la vagina mientras caminas por unos minutos. Si las paredes vaginales no son capaces de mantener la bola adentro, o sentís que se resbala, entonces tendrás que comenzar previamente con ejercicios de Kegel para fortalecer el músculo antes de emplear las bolas chinas. 

Por último, debes considerar si requieres de lubricante para que sea más sencillo, y si este no perjudica su uso. Si sientes que estas se resbalan por el lubricante, será mejor utilizar agua. 

¿Cómo utilizarlas para el suelo pélvico?

El ejercicio para fortalecer el suelo pélvico es progresivo, y se suelen crear rutinas que van desde los 10 minutos hasta 1 hora. Estos ejercicios son bastante sencillos y se pueden realiar de dos maneras:

Caminar con las bolas chinas

Como mencionamos anteriormente, las bolas chinas en su interior tienen otras esferas, más pequeñas y pesadas, que con el movimiento comienzan a vibrar mientras impactan con las paredes. Esta ligera vibración hace que los músculos de la vagina se mantengan naturalmente contraídos, y no requiere de nuestro esfuerzo o voluntad para que ocurra. Es por esta razón que al caminar con las bolas chinas introducidas en la vagina por unos minutos, ya estamos ejercitando el suelo pélvico.

Contraer y soltar el músculo, como “aguantando el pipí”

Otra forma de hacer el ejercicio es contrayendo el músculo, sosteniendo por unos segundos y soltando. Este último ejercicio se asemeja a “aguantar el pis” cuando necesitamos ir al baño y no podemos. En este caso, es importante recordar que si no existe algún tipo de movimiento, no existe vibración, y por ende no estamos haciendo el ejercicio. Por eso es importante contraer el músculo y aflojar, como se mencionó previamente. 

¿Cuánto tiempo hay que tener puestas las bolas chinas?

Depende de tu estado actual, peso y rutina que hayas elegido. Algunas pueden usarse hasta 2 horas, otras solo son recomendadas por 1 hora. Comprueba las indicaciones del fabricante para verificar las recomendaciones, sin embargo, la mayoría de los expertos recomiendan que como máximo dure entre 30 minutos y 1 hora. 

Si estás comenzando, puedes armar una rutina de la siguiente manera: la primera semana comienza con 10 minutos (si te es posible mantenerlas por ese tiempo). Luego, cada semana, aumenta entre 5 o 10 minutos, hasta llegar a los 60 minutos. 

Ten presente, que al igual que otras partes del cuerpo, debemos descansar e intercalar nuestros ejercicios para no agotar el músculo. Por lo tanto, esta rutina la puedes practicar 3 - 4 días a la semana.